miércoles, 25 de marzo de 2015

INTERLUDIO





Me pregunto si de verdad hay alguien que escucha, observa y lee al otro lado de la pantalla. Hacemos exposición pública de nuestro diario acontecer y algunos pensamientos que no dejamos que se escabullan por el desagüe del tiempo. Y nos complacemos en nuestro relato y las atrevidas frases que hemos escrito al abrigo fresco y estimulante de un Donosti: tónica, bayas de enebro, flor de hibisco, cardamomo y Seagrams americana... Llanuras de Ohio hacia Illinois para llegar a las orillas del Lago Michigan, donde arroja Chicago su enorme sombra de humanidad en los rascacielos.

¿Hay alguien tras esa pantalla en la que vemos nuestro reflejo desvaído? ¿La plasmática ventana por la que nos asomamos hoy al mundo?

No lo se. No lo sabemos. No los sabe. Pero no evito contactar casi a diario y poner tres o cuatro frases a vuela pluma. Una foto. Una canción. Un poema. 
Una barbaridad.

Las locuras del corazón son buenas como desahogo. Sin embargo, tienen consecuencias. Cotraindicaciones... tal y como reza en los prospectos de los medicamentos. Te curan el dolor por un lado al tiempo que te hacen un agujero en las entrañas. Yo he seguido caminos arriesgados y me he estrellado contra los muros de la incomprensión. También de la crueldad. Me he encontrado con  personas que yo imaginaba faltas de toda ruindad, dando pábulo a chismes de corruptos. Mujeres de bandera que me han gustado dejándose llevar por la ola de la podredumbre. Nada de modelos al uso con demasiada anorexia encima y muy escaso entendimiento, sino mujeres de verdad, con carácter, fuertes, corredoras... femeninas, hermosas, contundentes, guapas.

No lo entiendo.

De manera que tras la huida más o menos exitosa del frente de batalla, he de sumergirme con pasión en mis artesanas dotes de músico de las llanuras. Buscar algún sentido a tanto bombardeo y tanta mala leche escondida en los obuses. Leo a Jack Kerouac y me consuelo en su alucinante viaje a través de américa; lo que después sería la famosa Ruta 66, Nueva York, Chicago, Denver, San Francisco (por Los Ángeles o Salt Lake City). Me sumergo en la lectura americana de John Steinbech y esas ventanas al Oeste de mi corazón y mis anhelos. 

Música y remotas canciones. Relatos y poesía. Imágenes de mi mismo en la frontera de mi corazón. Locuras del corazón. Belleza. Sentimientos. Rutina. Viaje.

FOTOS
1) Puente cerca de Monterey, CA, entre San Francisco y Los Angeles, condado de Salinas. (La carretera del Pacífico)
2) LAS UVAS DE LA IRA, JOHN STEINBECK
3) CANNERY ROW, JOHN STEINBECK

miércoles, 11 de febrero de 2015

SEXTO POEMA- 9 DE FEBRERO DE 2015

LA CANCIÓN



DIOS Y EL MENDIGO



[…]
Saber que Dios se muere, se resbala
Que dios retrocede con los brazos cerrados,
Con los labios cerrados, con la niebla,
Como un campanario atrozmente en ruinas
Que desangra siglos de ceniza.

(“Ausencia de Dios”) MARIO BENEDETTI

Pensé
Que todo era mentira
Que la blanca paloma
Jamás existió

Pensé
Que genial fantasía
Creer
En la existencia de Dios


—Dónde estás cuando te necesitan—


Nadé
Más allá de los ríos
Que vierten sus aguas
En las islas del mar

Sufrí
Como nadie en su vida
Me puse en la Cruz
Y aguardé su llegada

Y dónde estás cuando te necesitan
¡Y dónde estás cuando te necesitan!

Te amé
Hasta el fin de los tiempos
Tú si eres mi diosa,
Bella mujer


Chupé
Tu elixir verdadero
Ascendí por tus piernas
¡Venus!...
Y tu valle al final























miércoles, 4 de febrero de 2015

QUINTO POEMA- CANCIÓN BLANCA (4 DE FEBRERO)

Hoy las previsiones sobre la nieve y los vientos procedentes del ártico (o de Siberia, que es mucho peor) se han hecho, por fin, realidad. A los amigos de la reciedumbre paisajística nos gusta sufrir los avatares climatológicos como si se tratase de una meta a superar. La efímera gloria del esfuerzo que, en definitiva, no nos lleva más que al interior de nosotros mismos. Ilusión y desesperación a partes iguales. Emoción estética y literaria depresión que nos conducen por la ruta de las artísticas pasiones. 
Cuando desde el Cerro de San Jorge he admirado el campo rusificado de las estepas, y Martés, allá, tras el vecino pueblo Alburolense, enseñando su fiero rostro curtido en geologías inconcebibles para el intelecto he pensado que la gloria, la emoción, el sufrimiento y el desgaste personal no son nada frente a toda esta tremenda belleza (impregnada de terribilitá) bajo el fino y cortante aire a un grado bajo cero. En seguida, tras mi breve desempeño como fotógrafo, me he ido a correr. 

La esperada nevada del invierno
que congela pasiones y caminos
Y el solitario corredor de las estepas
que desgasta sus pulmones con el frío

A un grado bajo cero por tu ruta
que dibujas en el mapa de tu anhelo
Por correr hasta el fin de la llanura
y asomarte al mar Mediterráneo

El que, paciente, aguarda tu llegada
Más allá de Martés y sus murallas
  Dolomías que han visto el tiempo detenerse
en mitad de los eones infinitos
Geológicos impulsos en sus crestas
Torrentes silenciosos en sus simas
que el abismo modeló sin darte cuenta
Y te traga sin las botas y el esquipo

Ay! Martés, que estás en los cielos
Vigilando mis carreras y mis rollos
de escultor apasionado de caminos
que recorro después de imaginarlos

Las pasiones que florecen en mi mente
 Peligrosa conexión con el espíritu
que me pide a voz en grito decisiones
Componer de la Justicia el equilibrio

Universo que me ignora...
Terrible soledad del que respira
arena y polvo del desierto
Y nieve en las arterias, congelada

Universo que me ignora...
Amigos que  lo fueron y me estorban
Pues cambiaron crueldad por buenos modos
Traiciones, falsedades y charadas
Graciosillos con talento inexistente
Chistosos con la gracia del soberbio
que piensa en los demás como gastados
accesorios que ya no sirven para nada

Corro yo por las estepas del invierno
viendo cimas, horizontes e Himalayas
Javalambre, que es la cuna de las nieves
Almenaras, un Cervino en Albacete
Por encima de las brumas que generas
Van tus Sierras persiguiendo al montañero
Quien se afana en su locura por subirlas
Quien ya sufre los caminos de la Vida



martes, 3 de febrero de 2015

3 DE FEBRERO- CUARTO POEMA

VISIONES EN LA CIMA


























VISIONES EN LA CIMA



Por encima de la bruma incandescente
Que amontona el desierto en las llanuras
A mirar alcanzan mis anhelos
De apátrida viajero de los años

Y si subí a tu cima, y la mirada
Sobre el alma pura de tus rocas
Cubiertas hace tiempo por la nieve
De los inviernos crudos de la estepa
No fue por  vanidad ni por deporte
Te subí para dar todo el sentido
Al trayecto indefinido de la vida

Y te vi.
Blanca del color de la belleza
Con tus tresmiles aflorando de la Historia
El  Veleta, Mulhacén y La Alcazaba
Que se ven desde la cumbre de Almenaras
Allá por la provincia de Albacete
Cuando pruebas el sopor de la  campiña
Y te metes en el camino de La Sierra

La cumbre de perfiles, fortaleza
Que a mirar alcanzas en la loma
Que aquí llaman Cerro de San Jorge
Y que sólo es, roma, una colina
Setenta metros sobre la llanura
De rastrojos amarillos en verano
Y viñedos de verdor resplandecientes,

También, las cercanas sierras valencianas
Que interrumpen la vista por el Este
Martés, Moluengo y Palomeras
En el umbroso paraíso de La Hunde
Y los dos ríos que se unen en Cofrentes
Por las quebradas tenebrosas de Pallás.
Buscando el agua tibia de los mares
¿Qué hace un montañero en tus barrancas?
Luchando, la nieve en la cintura
Que en invierno congela los paisajes
Y las visiones del desierto hasta la bruma

¿Qué acientífico impulso de locura
Le arrebata el alma y lo consuela
Asomado a las fauces del vacío
Abierto el corazón a las estepas?






miércoles, 28 de enero de 2015

TERCER POEMA- 28 DE ENERO (8:30AM)

SENDA


Los últimos días me he estado  dedicando a correr en estricta soledad por los viejos senderos que bajan de la llanura a la huerta. Esos caminos de la Historia que siguieron mis abuelos (que arreglaron y mantuvieron durante toda su vida) en busca de una tierra más feraz y un clima menos borde. He juntado recuerdos y actuales esfuerzos de aficionado al Trail-Running (qué diría mi abuelo si escuchara este palabro!!) para redescubrir y estudiar sobre el terreno la despiadada acción de los elementos.


Ayer corrí por los caminos de la Historia,
Allí conde mi abuelo dio de comer a su mula
En los espartales y en las riberas
Junto al río que le alimentó

Ayer fue un día memorable:
Corrí por las estepas hasta el río
Aunque  lo hice alejado de la orilla
Tenía miedo de ceder a tentaciones

Había rocas tratadas por el tiempo
Los siglos que arrojan su delirio
Con el viento y la lluvia en sus entrañas
Disolviendo tumores e intersticios

Un sol implacable iluminaba
La cinta del sendero en mi camino
De atrapada bestia en su locura
En mis tristes ojos  de asesino

Y el sudor, el jadeo y la carrera
La mañana, el viento y el paisaje
Disolvieron la química de mis humores
Por el torrente bendito de la sangre

Ayer corrí por los caminos de la Historia
Arrumbados ya por la erosión
Que el mundo arracimado de los hombres
Sometió a descuido y soledades

Volveré a bajar al río mientras sufro
Las rodillas reciclando las lesiones
Los impactos y la roca en mis tobillos

Volveré por las riberas soleadas
Protegidas en el surco de las hoces
Y las peñas que prodigan su templanza



Volveré…

Volveré descalzo a comprobar que soy valiente
Que no me importan las heridas y los cortes
Los impactos en las vértebras y los riñones
La terrible soledad de las veredas









domingo, 25 de enero de 2015

SEGUNDO POEMA- 23 DE ENERO


ODA A LA SIERRA DE MARTÉS




Martés que estás en los cielos,
Vigilándonos en las llanuras,
Soplando la costra de los siglos...
Coloreas  nuestras vidas, entre tanto

Ríos que ocultos permanecieron
Por la avaricia y sus labriegos,
Hoy corren libres hacia destinos
Que tú recoges en las entrañas.

A la manera de las cavernas:
Insondables abismos de tristeza,
Negros  tizones extinguidos
Que ardieron una vez en la mirada:

Del agotado caminante que termina
Su sendero en mitad de la distancia.
La que borra indefectible sus anhelos
La que pudre en los abismos su esperanza

La locura que engendra más locura
El odio no disuelto en tus riñones
La violencia, la injusticia, la venganza…
Purificar mi espíritu en tus alturas

En las crestas de caliza y las figuras
Que el viento modeló en su estructura
Erosivo discurrir de los eones
Y los glaciares que llegaron casi al mar

Yo te subo, los caminos, y venero
De los estratos tu gracia imperceptible
Tu espíritu en la roca que culmina
En mis ansias juveniles:  montañero!










miércoles, 21 de enero de 2015

PRIMER POEMA- 21 DE ENERO

Reflexión primera

Domésticas literaturas inspiradas en los paisajes del corazón. Los que recorro día tras días para escapar al tráfago de las estructuras: esas que-ideadas por personas cuya condición no es más elevada que la del cerdo común que se revuelca en la inmundicia-nos impone el cumplimiento del deber, nuestra función social, la esclavitud actual del trabajo, el sudor que destila el humillarse ante los poderosos para poder llevarse un dinero a casa y hacer un futuro para nuestros hijos. No soy comunista-aunque me entran ganas de serlo. Pero si esta revolución antisistema que se avecina sirve para extinguir a los mercenarios que no dudan en machacar a la gente porque ahora es lo que toca... ¡Bienvenida sea!




LA PENITENCIA

Si lo que piensas es en la Justicia
Restablecer equilibrios que nunca existieron
Dar a cada cual lo que  merece
Robar al que robó
Y ponerle un corazón al que jamás lo tuvo
Tendrás que coger—fuerte
El quebradizo astil de la  venganza
Como un asesino de las estepas
Sediento
Aullando
Sufriendo…
Como los lobos

Tendrás que olvidar la compasión
El respeto a los demás que tus padres inculcaron
En ese corazón  que se desangra
La bodega sin mamparos que se inunda
El buque carcomido por la broma
Mineral de residuos que intoxica
Estructuras del interior de tu cabeza
Que se hunde
Que se rompe
Que te estalla…

Había nidos en las copas de los árboles
Refugios de inocencia en las alturas
Lugares primigenios donde ir
Y encontrar el sentido de la vida

Y había nidos en las copas de los árboles
Y refugios de inocencia en las alturas

Con la helada al alba sales al camino
A buscar las huellas que dejaste
Grabadas en la arena de la Historia
Correr, sudar y desgastarte
Para no hacer ni pensar en otras cosas
Correr, sudar y desangrarte
Para no olvidar a tu enemigo
Y no agredir, ni matar, y perdonarlo.


 Cuando era más joven, fuerte y montañero!! Los Pirineos me otorgaron el valor y la  confianza no solamente en la Tierra, también en las personas. Creo que me urge volver aunque sea cruzando a pié, desclazo como Jesucristo, las altas estepas turolenses.